El cortometraje Gino de Audiovisuales Milenio fue proyectado en la muestra Rastros y Rostros como un aporte al proyecto que recuperó el patrimonio cultural de Sierras Chicas.
Por Amira López Giménez | amiralopez@elmilenio.info
El pasado domingo, durante una cálida noche, inauguró la muestra “Rastros y Rostros: Inmigración y diversidad cultural” en la antigua Capilla Histórica de Río Ceballos. Este trabajo realizado por el grupo Tica Hen reúne datos de la historia del corredor serrano y su desarrollo a través de las grandes inmigraciones europeas a nuestras tierras, alrededor del año 1583.
La particularidad de esta exposición reside en la historia que precede a las viñas serranas, conformada por innumerables anécdotas de antaño donde los ancestros lucharon por un futuro en las nuevas tierras. Este trabajo viene a complementar el proyecto sobre pueblos originarios en la región donde de alguna manera se vuelve a recuperar los recuerdos perdidos. Tica Hen no sólo recolectó información sino que además retornó a las raíces de la historia a través del contacto con las familias que de alguna manera fundaron el inicio de las ciudades en el corredor.
Desde Alemania, Italia, España e incluso Japón, familias como los Tavella, Stanevich, Rivara, Davini, Biasotto, y los Maedo provenientes de Okinawa, entre otras tantas familias, conservaron y transmitieron historias, objetos, fotografías, diarios y hasta antiguos vídeos en blanco y negro.
“Nosotros siempre tratamos de hacer recortes históricos y siempre pensando a nivel local, sobre Río Ceballos y nuestra historia. Vamos eligiendo de una manera arbitraria nuestros recortes no seguimos una línea de tiempo pero sí tenemos en cuenta aquello que nos parece que generó un cambio importante, por ejemplo, los pueblos originarios con la llegada del español, que es ahí donde se genera la primera inmigración y donde empieza a existir una mayor diversidad cultural. De todas maneras nos centramos más en historias de vida”, comenzó destacando Celeste Sanchez Goldar, creadora y organizadora de Rastros y Rostros.
Por su parte, la Fundación Josefina Valli de Risso y el Instituto Milenio Villa Allende contaron con una invitación especial. Durante la jornada se proyectó Gino, el cortometraje producido por Audiovisuales Milenio que sorprendió al público y que también realizó su aporte a la muestra.
Gino, resume de alguna manera una historia entre tantas, ficcional que no dista de lo real, cuenta en tan sólo unos minutos el transcurso de la vida de un niño italiano al día de hoy. “La muestra me pareció muy interesante porque consistió en una exposición de objetos provenientes de inmigrantes y distintas familias que han conservado las fotos y las cartas de los abuelos. Me pareció atrapante ver las nuevas generaciones que han quedado de estas personas que vinieron de distintos países y el valor que le dan al sacrificio que ellos hicieron como inmigrantes a través de esa exposición familiar de objetos. Para nosotros fue un honor que Gino se haya tenido en cuenta, si bien, no expusimos nosotros específicamente, rememoramos con nuestro corto un momento que pudo haber sido real y de aquella época. Termina Gino completando ese imaginario colectivo de lo que pudo haber pasado”, expresó Cristian Salas, encargado de Audiovisuales Milenio.
Además, la organizadora destacó la emotividad del film y su importante aporte que ayuda con la expansión de la muestra. En diálogo con El Milenio Celeste Sanchez Goldar cuenta sobre el proyecto, los obstáculos encontrados, las instancias superadas, y las anécdotas rescatadas en la búsqueda de la historia.
El Milenio: ¿Cómo hicieron para recolectar el material?
Sanchez Goldar: En realidad estamos trabajando en este proceso de investigación desde marzo, cuando empezamos a contactar las familias. Al principio se hace un poco costoso porque no se encuentra con facilidad y después las mismas entrevistas te van abriendo otras puertas. Después muchas personas nos prestaron objetos, hay muchas cajas de vidrios con documentos, fotos, la mayoría de los objetos que están en las cajas son originales, vinieron de otros países. Es increíble lo que la gente ha guardado y nos pareció lindo mostrarlo.
EM: ¿Qué valor tiene la conservación para ustedes?
SG: Lo que quisimos mostrar nosotros un poco en el video es la diferencia entre las personas, algunas trajeron muchas cosas y otras familias no trajeron nada, o bien no pudieron conservar nada. Son diferencias a cuanto la forma de inmigración que tuvieron y la forma de adaptarse al lugar al que llegaron.
EM: ¿Cuáles son esas formas?
SG: Es muy diverso, hay historias donde no les han contado nada y no saben absolutamente nada de sus ancestros, hay historias que les contaron todo y se acuerdan de muchas cosas como el barco en que vinieron, la edad que tenían, qué hicieron, en dónde pararon. Hay gente que guarda muchas cosas que trajeron de Italia. Después los Maedo, que son de Japón, no conservaron nada más que fotos. Pero, lo que nos interesaba además de los objetos que hablan por sí mismos, son las entrevistas que tienen esa cosa del recuerdo, del sentimiento y de una reconstrucción porque los recuerdos nunca son absolutamente reales, tienen una carga emotiva muy importante.
EM: ¿Cómo obtuvieron los videos?
SG: Con Tica Hen que comenzamos hace dos años fuimos realizando un centro de documentación donde conseguimos libros locales que hablan de Río Ceballos, música, videos, fotografías. Y de a poco fuímos consiguiendo quién nos prestara un video y otras cositas. El último pedacito del video es de la familia de mi mamá. por aquel entonces no era fácil tener cámaras y se pudo rescatar de algún momento en el que vinieron a veranear. A pesar de que es muy cortito la parte de Río Ceballos tiene mucho valor. Muestra un Río Ceballos absolutamente diferente. Eso también esta presente en las entrevistas, a mucha gente le impacta el cambio y estamos hablando de un periodo muy corto, son personas que tienen sesenta años, no son personas grandes, viejos. Paso poco tiempo y Río Ceballos cambió muchísimo.
También nos gusta mostrar lo que vamos perdiendo, nosotros como grupo no nos dedicamos solamente a hacer muestras sino que además queremos trabajar por el patrimonio de Río Ceballos, apostar a la conservación y darle un interés. Es importante no quedarnos viviendo en el pasado sino conservar lo que nos queda y que es parte de nuestra historia y patrimonio.
EM: Con respecto a Gino ¿Cómo fue que decidieron invitarlos?
SG: En realidad llegamos a la información por internet donde está el backstage del corto y cuando empezamos a armar la muestra decidimos que debían estar presentes porque es un trabajo precioso y a nosotros siempre nos gusta trabajar en red, con personas que tienen las mismas inquietudes o capaz que nada que ver pero que los mueve la misma inquietud que a nosotros. Creemos que eso siempre enriquece el trabajo y las muestras que hacemos.
El trabajo que ellos hicieron es maravilloso porque es desde la escuela, fue hecha con las padres y los alumnos de la institución y nos pareció hermoso para que se viera.
Lo otro que trajimos fue lo del Hotel de Inmigrantes de Bell Ville, investigando descubrimos que había existido un hotel de inmigrantes en Córdoba que tenía las mismas características que el de Puerto Maderos entonces nos contactamos con ellos. Era muy costoso que ellos vinieran entonces armaron una visita guiada con fotos para contar con esa información.
Muchas veces nosotros pensamos que esas historias son muy bellas pero en realidad están cargadas de tristeza, hambre, guerra, y tuvieron que viajar y adaptarse a algo nuevo y superar las cosas que les pasaron. Uno a la lejanía y tratando de armar la historia siempre la ve así. Queremos seguir tratando el proceso de inmigración hacia atrás pero, también llega a hoy. Es un fenómeno que se dió con algunas pausas pero prácticamente de manera interrumpida, la inmigración se sigue dando hasta el día de hoy y tiene mucha repercusión.
Nuestra intención también es mostrar que esta historia generalizada de la inmigración y que Argentina le abrió las puertas al mundo no es tan real, tampoco es tan real que los castigo tanto, hay muchos grises y forman parte de nuestra historia.
EM: ¿Acá en Sierras Chicas como se genera la construcción de la historia?
SG: Hay muchas personas interesadas pero creo que faltan políticas de estado, uno puede crear cierta conciencia y aportar un granito de arena. Nosotros trabajamos con la municipalidad en la recuperación del museo de la ciudad, tratamos de trabajar siempre con ellos y no contra ellos y hay que pedir que hayan políticas de protección porque uno solo no hace nada.